Los efectos ergogénicos de la cafeína están claramente demostrados en la mayor parte de la población deportiva.
Sabemos que la cafeína retarda la aparición de la fatiga, reduce la sensación de dolor y esfuerzo, mejora en la contracción muscular, incrementa de la oxidación de ácidos grasos, aumenta la producción de potencia media y estimula de la actividad motora.
Pero entonces ¿por qué a tus compañeros de grupeta les va genial y a ti, no te provoca ningún efecto o incluso reduce tu rendimiento?
La respuesta la tiene la genética y el responsable es el gen CYP1A2. Este gen es el involucrado en el metabolismo de la cafeína y existen tres tipos de genotipos diferentes que determinan como será la metabolización de la cafeína por el organismo:
AA (rápido)
AC (heterocigoto lento)
CC (homocigoto lento)
Un grupo de investigadores de la Universidad de Toronto relizó en estudio para determinar si las variaciones en este gen (AA, AC y CC) son responsables de modificar los efectos ergogénicos de la cafeína en un ensayo clínico realizado con ciclistas profesionales.
Y sus conclusiones fueron las siguientes:
La cafeína sólo mejora el rendimiento en los atletas que sean del genotipo AA.
El uso de cafeína en atletas con el genotipo AC no conseguiría ningún efecto y los portadores el genotipo CC reducen su rendimiento.
Estos resultados resaltan la importancia de considerar el genotipo CYP1A2 al decidir si los atletas deben usar cafeína como una ayuda ergogénica para mejorar el rendimiento de resistencia.
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